Last Century 16

Publicado por Hikari | Etiquetas: | Posted On jueves, 20 de enero de 2011 at 14:03

Esa noche Azumi durmió abrazando al peluche, aún envuelto en la toalla. A eso de las cinco de la mañana, Azumi recibió una llamada del señor Kiyoshi. Le dijo que quería hablar con ella y con su instructor en ese momento. Azumi, medio dormida, despertó a Johnny. Con él en brazos, fue al lavabo y cerró el pestillo, para que su compañera no la descubriera, y se transportó a Last Century.

Cuando el secretario se lo permitió, Azumi entró en el despacho. Iba en pijama, y Johnny seguía envuelto en la toalla aún dormido.
  • ¿Se ha vuelto a dormir? ¡Eh! ¡Despierta! – le dijo Azumi a Johnny zarandeándolo un poco.
  • ¿Qué quieres pesada? Déjame dormir… -dijo Johnny somnoliento.
  • ¡Qué estamos en el despacho de Kiyoshi! ¡Despierta de una vez! – le gritó Azumi.
  • ¿Eh? ¿Y cuando hemos llegado? – preguntó Johnny confuso.
  • Je, je… Formáis mejor pareja de lo que había pensado en un principio. – dijo Kiyoshi – Os he hecho venir por una razón. Quería hablaros de los informes de las últimas misiones.
  • B-Bueno… sé que se cayó el monstruo desde la azotea... ¡pero Johnny frenó la caída! – dijo Azumi un poco angustiada.
  • ¿Cómo? – preguntó el jefe con cara de sorprendido.
  • Ah… Que eso… no lo sabía… eje… ¡Nada! – respondió Azumi nerviosa.
  • De lo que yo quería hablaros es de tu gema, Azumi.
  • ¿De… mi gema?
  • Ajá. Realmente es sorprendente… ¿Sabías que puedes crear tu propia energía?
  • ¡Eso es imposible! – protestó Johnny - ¿Por qué nadie me había dicho a mí nada?
  • Lo hemos estado investigando en las misiones que ha tenido… Para ver si era un hecho puntual o algo más continuado. Y así es; parece ser que tu gema reacciona a tus emociones. Por eso aquel destrozo de la sala de entrenamiento… o el motivo por el cual cuando estas enfadada o en peligro logras hacer cosas como las de caminar por una pared.
  • ¿N-Nadie puedes hacer… eso? – preguntó Azumi algo confusa.
  • Nadie es capaz de acumular tanta energía como para vencer a la gravedad, si me estás preguntando eso. – respondió Kiyoshi con una sonrisa.
  • Wow… ¡Pe-pero..!
  • Y tampoco mucha gente – interrumpió Kiyoshi – puede enviar la energía a todas las partes del cuerpo como haces tú. Lo que te quiero decir es que puedes ser una gran ayuda para Last Century… o un gran problema si te descontrolaras… Así que te pido que vayas con mucho cuidado… Está bien que lo uses para salvar tu vida, pero mira que tus emociones no dañen a nadie. Esto es todo, puedes marcharte.
Azumi salió del despacho pensando que en verdad había hecho algo malo. Johnny le vio la cara y le dijo que no se preocupara, que había hecho un gran trabajo y que no dejara que las palabras de Kiyoshi la afectaran. “Lo único que pretendía era informarte del gran poder que tienes y pedirte que lo uses de la mejor manera posible” le dijo Johnny con una sonrisa, logrando animar a Azumi.

En la semana que siguió Azumi tuvo que enfrentarse a un par de E2. Al enfrentarse a ellos tenía en mente las palabras de Kiyoshi, y procuraba mantenerse serena para no provocar aumentos de energía que causaran problemas. Johnny la felicitó y le dijo que estaba haciendo un buen trabajo, pero que no era necesario preocuparse tanto por lo que pudiera pasar, que se centrara en capturar al monstruo. Un día, mientras Azumi estaba en clase, recibió una gran descarga de la gema. Miró el bolsillo de su chaqueta pero no recibió ningún mensaje al móvil, y le pareció extraño. De pronto, se empezaron a oír gritos por la ventana. Los que estaban al lado de la ventana empezaron a gritar “¡Un monstruo! ¡Un monstruo!”. Muchos se levantaron a mirar, incluida Azumi. Vio correr a todos los que estaban en clase de educación física y tras ellos un gran monstruo que los perseguía. La profesora se asomó también por la ventana, y al ver al monstruo, les dijo a todos sus alumnos que salieran corriendo de allí, ella la primera. Azumi, sin embargo, no se movió. “Un Devorador…” murmuró asustada. Miraba a los alrededores para ver si veía a algún trabajador de Last Century, pero ninguno aparecía. Llamó a Johnny para informarlo, y él le dijo que no hiciera nada, que iba a llamar a la empresa. Pero Azumi le gritó que iba a atrapar a una chica y que iba a entretenerlo. Johnny le gritó que era muy peligroso pero Azumi ya había colgado. Saltó por la ventana y en el aire activó su gema.

Una vez en el suelo, corrió hacia el Devorador y concentrando la energía en sus pies, saltó sobre él para apartarlo. Johnny, temiéndose lo peor, cogió el patinete para ir a ayudar a Azumi. Ésta estaba atacando al monstruo, pero era demasiado veloz y demasiado fuerte para ella. De un golpe, la hizo caer al suelo, de espaldas al monstruo. Azumi se levantó lentamente, dolorida, cuando oyó que Johnny gritaba su nombre. Ella se giró rápido hacia el monstruo, que iba hacia ella con su gran boca abierta. Azumi se quedó paralizada, cuando Johnny se abalanzó sobre ella con el patín. El golpe la hizo caer. Levantó la cabeza y vio el patín en el suelo, pero no había rastro de él. Muy asustada, y con los ojos llorosos, se giró hacia el monstruo. Éste, furioso, escupió los trozos del peluche, que quedaron esparcidos por el suelo, y miró a Azumi ferozmente.

En el momento en el que el cuerpo del peluche fue destruido por el monstruo, en la sala de tubos de Last Century, los cristales de un tubo se rompieron de golpe, dejando salir todo el líquido que había dentro, y cayendo al suelo el cuerpo de un chico, con los cables aún unidos a su gema, situada en su brazo derecho. El chico estaba inconsciente, pero no paraba de murmurar “Azumi…”.



© Hikari

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